"Sencillamente no tenía algo que decir y cuando no se tiene algo que decir lo mejor es callar".
Durante ese lapso de tiempo lleva una vida sencilla, trabaja por un tiempo en el Diario de Noticias, después como crítico literario en la revista Seara Nova, y fue comentarista cultural; poco después comienza a trabajar para una editorial. Fue censurado y perseguido durante la dictadura de Salazar, y para 1969 se afila al clandestino Partido Comunista Portugués, se divorcia de su esposa y abandona todo trabajo con la decisión de vivir de la escritura, ya fuera como articulista o novelista (decisión muy bien tomada).
Izquierdista, activista, articulista, novelista y poeta de medio tiempo; su primera gran novela fue Levantado do chao (Levantando del suelo) en 1980, donde plantea la diferencia de clases y la lucha por la libertad durante la dictadura de Salazar. Con esta novela Saramago tiene un punto de partida, una voz propia y única, impregnada del humor y un estilo inconfundible característico de sus obras posteriores. En 1991 publica El Evangelio según Jesucristo, obra que desataría gran polémica en Portugal, al grado de que el escritor se marchara a la isla de Lanzarote (España) como protesta a que el gobierno veta su presentación al Premio Literario Europeo de ese año.
En 1995 publica una de sus novelas más conocidas Ensayo Sobre la Ceguera, la cual es llevada al cine en 2008 bajo la dirección de Fernando Meirelles con el nombre de Ceguera. En 1998 se convierte en el primer, y hasta ahora único, portugués en ganar el Premio Nobel de Literatura. En 2005 se publica Las Intermitencias de la Muerte; en 2008 encontramos El Viaje del Elefante y sus últimas líneas, en el mundo de la novela, fueron plasmadas durante el 2009 en Caín.
Ya que le imprimí un sabor tan formal a estas líneas, creo que tengo derecho a un último párrafo de sentimentalismos. Este hombre extraordinario abandonó el mundo el 18 de junio de 2010, a los 87 años. No recuerdo que la muerte de un escritor me hubiera afectado tanto, en ese momento sólo había leído Ensayo sobre la Ceguera, pero creo que con unas sencillas líneas bastan para darte cuenta de la calidad de persona que era, que es. Fue la leucemia crónica y un fallo multiorgánico quienes le dieron punto final a la historia; dejando una viuda, una novela recién iniciada de unas treinta páginas, un legado donde encontramos crónicas, novelas, autobiografías, guías turísticas, artículos, teatro, poesía, discursos y relatos y un vacío muy curioso en el mundo de la literatura. No tenemos una tumba de concreto donde depositarle rosas, ya que fue incinerado; mejor que eso tenemos toda una vida de lucha y logros plasmada en libros. Tenemos parte de ese maravilloso mundo que fueron sus ideales, en sus novelas.
“La muerte es, sencillamente, no haber estado”
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